Job crafting: qué es y claves para implementarlo con éxito

El concepto job crafting, que en español se traduce como “construcción del trabajo”, hace referencia a un proceso mediante el cual un trabajador adapta su puesto de trabajo en función de su manera de ser y de trabajar, sus capacidades y conocimientos y sus preferencias y objetivos.

Dicho de otra forma, esta técnica pretende tener en cuenta las preferencias de los trabajadores para que estos puedan realizar tareas que se ajusten más a sus aptitudes y motivaciones. Se trata, en definitiva, de un nuevo enfoque que, al permitir que las personas adapten su puesto de trabajo, busca que se sientan más identificadas y felices con su rol dentro de la empresa, y esto contribuye a su motivación, su satisfacción en el trabajo y su productividad.

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En general, se trata de un proceso que debe llevar a cabo cada persona, mediante un ejercicio de autoevaluación de su forma de trabajar, sus capacidades, sus preferencias y sus objetivos. Sin embargo, para implementar el job crafting, los directivos y responsables de equipo deben ofrecer flexibilidad a los trabajadores para que estos puedan adaptar ciertos aspectos de su día a día en la empresa.

El job crafting puede dividirse en tres grandes grupos, modalidades o categorías en función de los aspectos en los que se basa el proceso y que los trabajadores desean reforzar. Son los siguientes tipos:

El task crafting consiste en modificar y adaptar aspectos relacionados con las tareas y responsabilidades de un trabajador, en función de las capacidades y aptitudes de la persona en cuestión. Por lo tanto, esta modalidad está relacionada con potenciar los puntos fuertes de los trabajadores.

Un programa de construcción del trabajo aplicado a las tareas se basa en cambiar las responsabilidades y labores de un trabajador, de modo que su día a día consista, principalmente, en realizar las tareas que estén más alineadas con sus aptitudes, objetivos y motivación. De esta manera, la productividad aumenta y el trabajador se siente mucho más satisfecho con su trabajo y más comprometido con la empresa.

Se trata de una modalidad que se centra en la relación entre el trabajador en cuestión y los demás miembros del equipo. El relational crafting consiste, por lo tanto, en modificar o adaptar la forma en la que un trabajador interactúa con las demás personas que forman parte del día a día de la empresa.

En cuanto a las relaciones profesionales, el job crafting puede ayudar a los trabajadores a adquirir nuevas ideas y puntos de vista mediante la comunicación con otros profesionales de departamentos distintos o personas con más o menos experiencia. Además, también puede ayudar a mejorar el trabajo en equipo.

Por último, el cognitive crafting hace referencia a la manera en la que un trabajador percibe distintos aspectos relacionados con su trabajo, tanto sus tareas y responsabilidades, como la relación que mantiene con sus compañeros. En otras palabras, este proceso suele consistir en cambiar la percepción o punto de vista que una persona tiene de su trabajo y a entender mejor la importancia de sus funciones. El objetivo es que su motivación laboral aumente y que sienta que está contribuyendo a conseguir un objetivo importante.

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Así funciona

El job crafting o construcción del trabajo supone beneficios tanto para las organizaciones, a nivel general, como para los empleados, a nivel individual. Entre sus principales ventajas, es importante destacar las siguientes:

• Los trabajadores sienten que tienen más flexibilidad y que pueden tomar más decisiones en relación con sus tareas y responsabilidades, lo cual hace que se sientan valorados. Esto mejora la motivación laboral, así como el employee engagement.

• Los empleados se sienten más satisfechos con su trabajo, puesto que sienten que este está alineado con sus objetivos, valores y manera de pensar.

• La productividad también aumenta, puesto que los trabajadores se sienten motivados y comprometidos con la empresa. Esto resulta beneficioso para el crecimiento de la organización y para el cumplimiento de objetivos.

• El job crafting también puede beneficiar el trabajo en equipo y el clima laboral.

Para implementar el job crafting en una empresa y poder aprovechar todas sus ventajas, es recomendable tener en cuenta los siguientes puntos:

• Los trabajadores pueden conocer su forma de trabajar mucho mejor y saber cuáles son sus puntos fuertes y qué aspectos podrían mejorar a través de una prueba de autoevaluación o autoconocimiento. Para ello se puede llevar a cabo una evaluación del desempeño de manera regular.

• Los trabajadores deberán evaluar su puesto de trabajo e identificar con qué aspectos se sienten más identificados, qué es lo que más les gusta, qué no les motiva tanto y qué tareas están más alineadas con sus objetivos.

• La empresa debería tener en cuenta todos estos aspectos en el momento de diseñar los puestos de trabajo y determinar las tareas y responsabilidades de cada miembro del equipo. Para poder conseguir cambios eficaces a largo plazo, es importante contar con unos objetivos bien definidos y un plan de trabajo bien diseñado.

• Es esencial que los responsables comuniquen a todos los miembros del equipo cuáles son los propósitos de la empresa, de modo que los trabajadores comprendan cuál es su papel y por qué este es importante para el crecimiento de la organización.

• Al diseñar planes de desarrollo, es importante tener en cuenta las opiniones y preferencias de los propios trabajadores. Por ejemplo, si a un trabajador le interesa y le motiva desarrollar su creatividad, esto es algo que debería tenerse en cuenta al diseñar su plan de formación.

• La comunicación interna es indispensable, y es necesario llevar a cabo reuniones de manera recurrente. Los responsables de equipo deben comunicar a los trabajadores el funcionamiento y los objetivos del job crafting, y también deben invitar a los empleados a compartir sus opiniones, preferencias y preocupaciones.

El job crafting o construcción del trabajo se utiliza cuando una empresa desea adoptar un nuevo enfoque para permitir a los empleados cambiar y adaptar ciertos aspectos de su rol y su día a día en la empresa, de modo que su puesto de trabajo esté más ajustado a sus preferencias, objetivos, aptitudes y expectativas.

El job crafting es un proceso que deben llevar a cabo, principalmente, los trabajadores, puesto que deberán ser ellos quienes analicen sus puntos fuertes, sus capacidades, sus intereses y sus preferencias y, en función de esto, ellos ajustan o adaptan su manera de trabajar. Sin embargo, para poder implementar el job crafting, es indispensable que los responsables de equipo ofrezcan flexibilidad a los trabajadores y les proporcionen información sobre qué es el job crafting, cuáles son sus objetivos y qué proceso deben seguir.

Un ejemplo de job crafting sería el siguiente: una persona se dedica a la gestión de las redes sociales de su empresa. Sus tareas consisten en redactar contenido, responder a dudas de los usuarios y programar las publicaciones, entre otros ejemplos. Sin embargo, sus intereses incluyen el diseño gráfico y la edición de vídeo, por lo que decide involucrarse, también, en otras tareas relacionadas con estos aspectos. Esta decisión le permite desarrollar su creatividad y llevar a cabo otro tipo de tareas que también le motivan, le interesan y le permiten crecer profesionalmente.