Beneficios sociales: ¿qué son y cómo implementarlos?

Los beneficios sociales, también conocidos como beneficios de empresa, son una serie de ventajas no dinerarias que las empresas pueden ofrecer a sus empleados como complemento a su remuneración y paquete de compensaciones. Estos beneficios satisfacen determinadas necesidades de los empleados y, al no ser de carácter económico, no se pueden intercambiar por dinero. 

Tampoco puede considerarse una mejora salarial, ya que su principal objetivo es mejorar el bienestar de los empleados y su calidad de vida. Por ello, es frecuente que estos beneficios sociales cubran aspectos como  la totalidad o parte del pago de la guardería, de restaurantes y comida, de la práctica de ejercicio o un seguro de salud, entre otros aspectos. 

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También es importante señalar que el coste de los beneficios sociales es asumido íntegramente por la empresa y que en ningún caso puede suponer un gasto para el empleado. Estas pueden obtener una deducción del 100% del coste asumido por estos beneficios en el Impuesto de Sociedades y no pagar IRPF. Por su parte, el empleado tributa por ellos a la Seguridad Social, ya que forman parte de su salario.

Contar con beneficios sociales aporta una serie de ventajas tanto de carácter fiscal como a nivel cualitativo para la empresa y para los empleados. Estas son algunas de las más señaladas: 

Las principales ventajas para las compañías son las siguientes:

• Mejora del employer branding: la imagen de la empresa y su capacidad de atraer a talento cualificado aumenta al ofrecer mayores incentivos que hacen atratactiva la contratación. 

• Incremento del compromiso de los empleados: los empleados sienten que su empresa se preocupa por ellos, lo que contribuye a aumentar su compromiso y satisfacción.

• Aumento de la satisfacción laboral: los beneficios sociales tienen un impacto directo en el bienestar de los empleados y por tanto en su satisfacción en el entorno laboral.

• Deducción en Impuesto de Sociedades: las empresas pueden deducirse en la mayoría de casos el 100% en el Impuesto de Sociedades. 

• Exención de IRPF: la mayoría de beneficios también están exentos en un porcentaje determinado o en su totalidad del pago de IRPF.

Para los empleados conviene destacar las siguientes ventajas:

• Tributar a la Seguridad Social: el empleado puede tributar por los beneficios a la Seguridad Social lo que se traduce en un mayor poder adquisitivo en su nómina. 

• Aumento del bienestar: los beneficios sociales buscan contribuir a mejorar el bienestar laboral de los empleados tanto en el entorno de trabajo como a nivel personal.

• Incremento de la productividad: un mayor bienestar y compromiso con la empresa genera mejores índices de productividad y un mejor desempeño laboral. 

• Menor rotación: cuando los empleados están a gusto con la empresa y sienten que esta contribuye a su bienestar, aumenta la retención y se reduce la rotación de personal.

• Mayor compromiso: todo lo anterior hace que, por lo general, los niveles de compromiso y fidelidad con la empresa se incrementen, generando un clima laboral positivo. 

Hay dos conceptos que con frecuencia tienden a confundirse y son los beneficios sociales y la retribución flexible. Sin embargo, tienen diferencias notables y es importante conocer qué implicaciones tienen tanto para la empresa como para el empleado. Veamos en qué consiste cada concepto:

• Retribución flexible: con la retribución flexible el empleado elige recibir parte de su sueldo en productos o servicios de su elección en vez de en dinero, de manera gratuita o por un precio inferior al de mercado. Esta parte destinada a productos o servicios no puede suponer más del 30% del salario bruto anual y ha de aplicarse por encima del salario mínimo (SMI). Además, están exentos de IRPF. Por eso, el empleado recibe un aumento en su salario mientras que la empresa no tiene un coste añadido.

• Beneficios sociales: como ya hemos visto anteriormente, los beneficios sociales sí tienen un coste para la empresa ya que se ofrecen como un añadido al salario de los empleados que corre a cargo de la compañía. Se trata de determinados servicios o productos que, en ningún caso, pueden ser monetarios. Igualmente, no pueden representar más del 30% del salario bruto del trabajador y las empresas pueden deducir el 100% en el Impuesto de Sociedades. 

Es importante saber que los bienes o servicios que se ofrecen en ambos casos, pueden ser iguales (seguro de salud, ticket restaurante, cheque guardería, etc.).

Estos son algunos de los beneficios más demandados y valorados por los empleados: 

Este tipo de beneficio social supone una ayuda a la movilidad de los empleados y un incentivo para que utilicen el transporte público como el metro, el autobús, el tren, etc. Por lo general, las empresas cubren una parte del gasto total del ticket de transporte. Este gasto es 100% deducible para la empresa en el Impuesto de Sociedades y el empleado no tiene que pagar IRPF siempre y cuando no se superen los 1.500€ anuales por trabajador.

Con un cheque restaurante los empleados pueden pagar parte de su compra o gasto en restaurantes o establecimientos que vendan comida, como supermercados. De nuevo, la empresa puede deducir el 100% en el Impuesto de Sociedades y están exentos de IRPF para el empleado hasta en un máximo de 11€ al día. 

Un seguro de salud privado es otro de los beneficios sociales que las empresas suelen ofrecer, ya que supone un complemento a la cobertura pública que reciben los empleados. Dentro de estos también podemos encontrar algunos específicos como por ejemplo un seguro dental.

Igualmente, las empresas pueden deducir el 100% en el Impuesto de Sociedades y están exentas de tributación hasta en un máximo de 500€ por trabajador, pudiendo haber variaciones en función de cada Comunidad Autónoma. 

El cheque guardería, por su parte, cubre parte o la totalidad del coste de la guardería para los hijos de los empleados de 0 a 3 años. Así se trata de dar una ayuda para mejorar la conciliación laboral y familiar. Está exento de tributación al 100% y la empresa puede deducir el 100% en el Impuesto de Sociedades.

Con la formación bonificada los empleados pueden acceder a cursos de forma gratuita o costeando parte de ella. Supone un incentivo para reforzar o aumentar las habilidades profesionales, logrando un ambiente laboral en el que se fomenta el desarrollo de los trabajadores.

Este beneficio social también está exento de IRPF para el trabajador y la empresa podrá bonificar la formación en un porcentaje que varía en función del número de empleados.  

Cada vez más empresas ofrecen a sus trabajadores la posibilidad de cubrir de forma completa o parcial el gasto del gimnasio, actividades deportivas específicas como yoga o pilates o incluso sesiones de fisioterapia. Esto contribuye al bienestar de los trabajadores, lo que repercute en un mejor clima y desempeño laboral. 

Ofrecer una jornada flexible supone que los empleados tienen un horario determinado en el que pueden empezar y terminar de trabajar; realizar trabajo en jornada intensiva, teletrabajar o incluso concentrar sus horas de trabajo en una semana laboral de 4 días. 

Para cumplir con la normativa de control horario en una jornada flexible de trabajo, resulta de gran utilidad utilizar un software de registro de la jornada laboral. Este tipo de sistemas permiten hacer un seguimiento diario y un recuento del tiempo trabajado pudiendo presentarlo a las autoridades competentes en cualquier momento. 

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Las empresas también pueden dar a sus trabajadores días adicionales de vacaciones dentro del paquete de beneficios sociales. La normativa establece que estos días libres no podrán ser inferiores a 30 días naturales al año, lo que equivale a 2,5 días al mes. A partir de ahí, las empresas pueden incrementarlos con el objetivo de aumentar el bienestar y la satisfacción laboral de los trabajadores.

Sobre todo para los puestos comerciales que necesitan desplazarse con frecuencia por motivos laborales es habitual que las empresas pongan a su disposición un coche de empresa. Cuando este se utiliza exclusivamente en el marco de trabajo, las empresas pueden deducirse el 100% del IVA y los gastos del vehículo. En este sentido trabajador no tiene ningún coste asociado por el uso de este vehículo. 

Uno de los beneficios sociales más demandados por los empleados en los últimos años es la posibilidad de acceder a un servicio de salud mental, como terapia psicológica, para sus empleados. Esto tiene un impacto directo positivo en el bienestar de los trabajadores que pueden tratar tanto problemas personales como asociados al trabajo como por ejemplo la ansiedad laboral.  

Descarga: Salud mental y trabajo, la importancia del bienestar laboral

El espacio de trabajo es el lugar en el que pasamos gran parte de nuestro día a día, por lo que es importante que las empresas tomen medidas para fomentar el bienestar de sus equipos.

A través de este informe, Personio revela la situación de los empleados españoles en sus empresas y sus demandas para mejorar su bienestar laboral.

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Para poner en marcha un plan de beneficios sociales que tenga un impacto realmente positivo en los empelados y en la empresa, es recomendable seguir una serie de pasos para ejecutarlo adecuadamente. Estos son algunos de los consejos que puedes seguir a la hora de implementarlo:

Uno de los primeros pasos será evaluar si tu empresa necesita un plan de beneficios sociales o si puede prescindir de el. En este sentido, será necesario tener en cuenta el presupuesto con el que cuenta la empresa, el desarrollo del negocio y si puede permitírselo.

Por ejemplo, no tendría sentido que poner en marcha beneficios sociales supusiera una reducción salarial para los empleados. De igual modo, si el grado de satisfacción y motivación general en la empresa es bajo, los beneficios sociales pueden ser un motor de cambio. En definitiva, se trata de definir las necesidades de la empresa y ver cómo pueden mejorarse a través de estos planes.

A continuación, será necesario averiguar qué es lo que necesitan los empleados y qué demandan a la empresa. Para ello, se pueden realizar encuestas de satisfacción laboral con preguntas concretas enfocadas a este objetivo, reuniones one on one o dinámicas de grupo en las que los empleados puedan expresar su opinión y sus necesidades. 

Además, también será conveniente tener reuniones con los líderes de equipo para saber qué aspectos necesitan los trabajadores en su día a día. De igual modo, es clave analizar los principales KPIs de recursos humanos como el absentismo, la tasa de rotación o los índices de productividad para extraer conclusiones relevantes.

Una vez identificadas las necesidades, será necesario establecer una serie de objetivos que se quieren lograr. Lo idóneo es que estos objetivos sean SMART (por sus siglas en inglés): específicos, medibles, alcanzables, relevantes y determinados. Esto te ayudará a definir el siguiente paso que será determinar qué beneficios se van a implementar, en función de las necesidades de la empresa y de los empleados. 

Hay empresas especializadas en beneficios sociales que se encargan de su gestión y facilitan la tarea al departamento de RR. HH. Este tipo de partners cuentan con diferentes opciones de beneficios como por ejemplo ticket restaurante, guardería, formación seguro de salud, etc. Las empresas pueden elegir aquellos que mejor se adaptan a sus necesidades y delegar la gestión de su puesta en marcha y seguimiento.

Por último y una vez implementado el plan de beneficios, es necesario medir el impacto que ha tenido, su alcance y qué resultados se han logrado en base a los objetivos que se establecieron. Por ejemplo, si uno de los aspectos que se buscaba era reducir la rotación, se puede evaluar si se ha conseguido y de qué manera. 

También resulta útil saber cuáles son aquellos beneficios que los empleados valoran más y cómo de satisfechos están con ellos. Para ello, puedes realizar encuestas o reuniones periódicas de evaluación.

Como hemos visto en este artículo, ofrecer beneficios sociales tiene una serie de ventajas tanto para la empresa como para los empleados que pueden ver su bienestar y satisfacción laboral mejorada. Implementar un plan de beneficios no debe suponer un aumento de las tareas administrativas del área de RR. HH. ni de su carga de trabajo.

Por eso, es recomendable acudir a un socio externo especializado en la gestión de beneficios sociales. En Personio contamos con la ayuda de Cobee, una de las empresas líderes en beneficios y retribución flexible para empleados. Al utilizar nuestro software de gestión de RR. HH. las empresas también pueden hacer uso de este servicio y ofrecer a sus empleados un paquete de beneficios totalmente adaptado a las necesidades de cada organización. 

Si quieres saber más sobre esta opción y el resto de ventajas que podemos ofrecerte, ¡no dudes en contactar con nuestro equipo! Estaremos encantados de saber más sobre cómo podemos ayudarte a impulsar y optimizar la gestión de tu departamento de RR. HH.