Base máxima de cotización 2025: todo lo que debes saber

La base de cotización máxima es el tope máximo de salario que se tiene en cuenta para determinar la cuantía de las contribuciones a la Seguridad Social que se realizan en España. Estas cotizaciones deben realizarlas los trabajadores y los empleados en la parte porcentual que corresponde en cada caso y que veremos más adelante. 

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Además de la base máxima de cotización también se fija una cuantía mínima para garantizar el equilibrio de las prestaciones y aspectos como la financiación del sistema de pensiones. En resumen, ambos conceptos pueden definirse de la siguiente forma: 

• Base de cotización máxima: corresponde al salario máximo de los trabajadores sobre el que se aplican las contribuciones. Es decir, si el sueldo de un empleado supera esa cifra, no cotizará por la parte que exceda la base máxima. 

• Base de cotización mínima: es la cuantía que se establece como el mínimo que los trabajadores deben aportar en función de sueldo. 

La base máxima de cotización 2025 a la Seguridad Social en España es de 4.909,50 euros mensuales brutos para todas las categorías profesionales. Por otro lado, las bases mínimas de cotización dependen del grupo de cotización del trabajador. En general, la base mínima se ajusta en función del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Estas cifras determinan el máximo y el mínimo sobre el cual se calculan las cotizaciones de forma que si un trabajador tiene un salario superior a la base máxima, la parte del sueldo que exceda este límite no será tenida en cuenta para las aportaciones ni para futuras prestaciones.

Las bases de cotización al Régimen General de la Seguridad Social por contingencias comunes varían en función del grupo de cotización al que pertenece cada trabajador. Estos grupos están definidos en el sistema de la Seguridad Social según la categoría profesional y el tipo de trabajo que se realiza.

Los grupos de cotización establecen diferentes rangos para los trabajadores según su categoría laboral, tal y como puedes puedes ver en la siguiente tabla comparativa en la que detallamos las base mínima y máxima de cotización para cada uno. 

Como explicábamos antes, la base mínima cambia según el grupo y el salario mínimo que se haya establecido cada año. En 2025 es de 1.184 euros brutos mensuales. 

Uno de los conceptos que es necesario tener en cuenta al hablar de la base máxima de cotización 2025 es el Mecanismo de Equidad Intergeneracional, también conocido como MEI por sus siglas. Su principal objetivo es reforzar el sistema de pensiones a través de una contribución que se refleja en la nómina de los trabajadores por cuenta ajena y a la que los autónomos también deben hacer frente.

El MEI afecta directamente a la base máxima de cotización, ya que supone un incremento del porcentaje que tienen que aportar los trabajadores y las empresas. Además, se aplica a todas las bases de cotización por lo que quienes cuentan con salarios más altos también tienen que contribuir por este concepto. 

Si quieres saber más sobre el efecto del MEI en la base máxima cotización 2025, echa un vistazo a nuestro artículo: Nuevo impuesto en nóminas MEI.

Por otro lado, un nuevo concepto que se incluyó en 2025 fue la cuota de solidaridad: una cotización adicional que tan solo se aplica a los salarios que superan la base máxima de cotización fijada. Por lo tanto, si el sueldo bruto de un trabajador es mayor que la base máxima deberá contribuir con la cuantía superior. 

La cuota de solidaridad tiene por objetivo, igual que el MEI, incrementar la recaudación para las pensiones. Además, se aplica en tres tramos progresivos: 

• Tipo del 0,92%: para la parte del salario entre 4.909,51€ y 5.400,45€.

• Tipo del 1%: para la fracción comprendida entre 5.400,46€ y 7.364,25€.

• Tipo del 1,17%: para los ingresos que excedan 7.364,25€.

Descubre más información en nuestro artículo sobre la cuota de solidaridad.

Los tipos de cotización son los porcentajes aplicados a la base de cotización para determinar las aportaciones que tanto los trabajadores como las empresas han de efectuar a la Seguridad Social. Estas cotizaciones financian diversas prestaciones, como son las pensiones, el desempleo, la formación profesional o el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA).

En 2025, los tipos de cotización incluyen distintos conceptos, cada uno con un porcentaje específico que se distribuye entre el trabajador y la empresa. A continuación, te mostramos  muestra una tabla con los datos actualizados: 

El cálculo de la base máxima de cotización 2025 sirve para determinar cuánto se debe contribuir a la Seguridad Social y para hacerlo, hay que tener en cuenta los siguientes aspectos: 

• Se toma el salario bruto mensual del trabajador como referencia.

• Si el salario es inferior o igual a la base máxima (4.909,50 € en 2025), la base de cotización coincide con el salario.

• Si el salario es superior a la base máxima, la cotización se limita a 4.909,50 €, sin contar el exceso.

• A partir de 2025, si el salario supera la base máxima, se aplica además una cuota de solidaridad sobre la parte que excede este límite, según los siguientes tramos:

  • 0,92% para ingresos entre 4.909,51 € y 5.400,45 €.

  • 1,00% para ingresos entre 5.400,46 € y 7.364,25 €.

  • 1,17% para ingresos superiores a 7.364,25 €.

Pongamos un ejemplo práctico con un trabajador que tiene un salario bruto mensual de 2.300 euros. Su base de cotización será la misma al ser inferior a la base máxima de 4.909,50 €. 

Si se aplican los tipos de cotización vigentes en 2025, deberá aportar 149,04 € en total, distribuidos en contingencias comunes (108,10 €), desempleo (35,65 €), MEI (2,99 €) y formación profesional (2,30 €). La empresa, por su parte, cotizará 703,11 €, incluyendo sus aportaciones a la Seguridad Social. 

Como su salario no supera la base máxima, este empleado no está sujeto a la cuota de solidaridad y sus cotizaciones se calcularán íntegramente sobre su salario bruto.

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La base de cotización máxima 2025 tiene un impacto directo en cómo se gestionan las nóminas y en las contribuciones que las empresas tienen que hacer. Por eso, si trabajas en RR. HH., contar con herramientas que simplifiquen todo lo relacionado con la remuneración de los empleados y el cumplimiento de la normativa es fundamental.

Para ello, un software de gestión de la remuneración es una herramienta clave para disponer de toda la información de los empleados y crear procesos automatizados que ahorren tiempo y esfuerzos a los departamentos de RR. HH. Con este tipo de soluciones podrás: 

• Automatizar el cálculo de las bases de cotización y las retenciones

• Actualizar nóminas tanto de forma interna como con una gestoría externa.

• Garantizar la protección de datos personales de los empleados en todos los procesos.

• Crear reportes detallados y analizar la evolución salarial de la empresa.

• Facilitar la integración con otros sistemas contables y fiscales.

Además, un software como el de Personio te ayuda además a cumplir con la normativa laboral como el registro horario, la ley de inteligencia artificial o el despido por incapacidad permanente total, entre otras. 

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